La comunidad cristiana de Puerto Wilches honra la memoria de una pareja que dedicó su vida al servicio espiritual y social. Su partida, ocurrida con horas de diferencia, deja una huella imborrable.
Vijagual, corregimiento de Puerto Wilches, vive uno de los momentos más dolorosos y conmovedores de su historia reciente. El pastor José Rafael Padilla y su esposa, Ofir Piñeres, reconocidos por su entrega en la Iglesia Cristiana Cuadrangular. Fallecieron con apenas unas horas de diferencia, dejando un legado de fe, amor y servicio el13 de octubre.
El pastor Padilla fue trasladado a Bucaramanga para someterse a una cirugía a corazón abierto. Aunque el procedimiento era complejo, la comunidad mantenía la esperanza. Sin embargo, las complicaciones fueron irreversibles. Su cuerpo fue llevado de regreso a Vijagual para ser despedido por sus feligreses.
Un infarto fulminante
Durante el velorio, en un momento que estremeció a todos, la pastora Ofir Piñeres sufrió un infarto fulminante al ver el cuerpo sin vida de su esposo. Falleció en el templo, rodeada por familiares y miembros de la congregación, quienes aún no pueden creer lo sucedido.
José Rafael y Ofir no solo eran líderes espirituales, sino también pilares comunitarios. Juntos dirigieron campañas de ayuda, jornadas de oración y encuentros familiares. Su casa fue refugio para muchos, y su testimonio de vida, ejemplo de amor incondicional.
“Ellos no solo predicaban el amor, lo vivían cada día”, expresó una feligresa entre lágrimas.
Velados juntos en el templo que los vio servir
El templo de Vijagual se ha convertido en un altar de memoria. Flores, cantos y oraciones acompañan una ceremonia doble que honra su legado. La Iglesia Cristiana Cuadrangular ha convocado una jornada especial de homenaje, con testimonios, fotografías y mensajes de gratitud.
Redacción Nacional
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