La ex estrella porno Brittni De La Mora tiene ahora la misión de difundir el Evangelio y guiar a la gente hacia la verdad. Recientemente planteó una pregunta conmovedora: “¿Está bien ver pornografía cuando estás casado?”
De La Mora y su esposo, Richard, a menudo abordan preguntas difíciles sobre el sexo, el matrimonio y las relaciones, aventurándose en preguntas como esta en su popular podcast, ” Let’s Talk Purity “.
Brittni dijo que esta pregunta sobre la pornografía y el matrimonio es una que la pareja se hace con frecuencia, y algunos se preguntan si la pornografía es una alternativa viable al adulterio. Sin embargo, antes de entrar en esa pregunta, Richard dijo que es necesario retroceder y mirar la pornografía en sí.
“Primero hablemos de pornografía”, dijo. “¿Está bien en general ver pornografía?”
Richard y Brittni procedieron a desmantelar el argumento de que la pornografía es inofensiva y no daña a nadie: opiniones expresadas por algunos defensores y otros que buscan descartar cualquier peligro.
Brittni, quien fue estrella de cine para adultos durante siete años y conoce los horrores y las falsedades que arrasan la industria, ofreció una reprimenda sincera y cruda al consumo de pornografía.
“No, no está bien ver pornografía”, dijo. “El hecho de que algo esté disponible para usted no significa que deba utilizarlo”.
Brittni continuó: “La pornografía es… una puerta de entrada. Activa en tu cerebro… los mismos receptores de dopamina que la cocaína. Por lo tanto, se ha demostrado que es adictivo”.
Dijo que la pornografía puede convertirse en una fijación y una especie de droga, arrastrando a las personas cada vez más hacia el abismo y dañándolas en el camino. Brittni dijo que darse cuenta de que este contenido es profundamente dañino para las almas, las familias y los matrimonios puede abrir los ojos de las personas lo suficiente como para empoderarlas a “dejar de verlo”.
Más allá de eso, Richard dijo que hay otro factor en juego: la deshumanización de la creación de Dios.
“Cuando miras pornografía… estás cosificando a una mujer o estás cosificando a un hombre”, dijo, señalando que estas imágenes, con el tiempo, pueden distorsionar la mente de las personas y hacer que menosprecien a las personas de la vida real que encuentran. “Ahora, estás tomando estas imágenes, y estas imágenes ahora están creando fantasías falsas, especialmente en tu matrimonio, fantasías falsas en general”.
Además de estos temas, se dieron cuenta de que la pornografía crea aislamiento y puede provocar disfunción eréctil, entre otros problemas personales.
“No sólo afecta tu alma, sino que también afecta tu cuerpo”, dijo Richard.
Después de establecer todos los problemas que puede crear la pornografía, la pareja volvió a la pregunta inicial: ¿está permitido ver pornografía en el matrimonio? Brittni recurrió a las Escrituras para hacer su llamado.
“Jesús dice que si miras con lujuria a otra mujer, ya has cometido adulterio”, dijo. “Dios está mirando primero tu corazón, y por eso si estás dispuesto a ir y mirar a otra persona en el acto más íntimo… ya estás cometiendo adulterio porque lo estás haciendo en tu corazón”.
Las parejas que enfrentan dificultades no encontrarán satisfacción en la pornografía porque la pornografía en sí es dañina y, por lo general, hay un problema de raíz que debe abordarse para encontrar sanidad o volver a la normalidad, argumentó la pareja.
En lugar de recurrir a la pornografía cuando surgen problemas o no hay relaciones sexuales, dijeron que las parejas casadas deben comunicarse. Richard argumentó que “la intimidad comienza fuera del dormitorio” y debe comenzar con buenas conversaciones que lleguen al meollo del problema.
“Necesitamos amistades fuertes dentro de nuestro matrimonio”, dijo la ex estrella del porno. “Ambos se sienten escuchados, validados, amados, aceptados, y eso se desborda”.
Richard concluyó la conversación con una simple proclamación tanto para solteros como para parejas: “Nunca es un buen momento para ver pornografía”.
“No dejes que el enemigo te golpee”, dijo. “’Oh, pero esto le va a dar vida a mi matrimonio’ o, ‘Oh, es mejor’. No, esas son las mentiras del enemigo. Todo lo que os envía el enemigo es mentira”.
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