Jenny Weaver, quien practicó la hechicería por muchos años y hoy en día es cristiana, emitió la advertencia de acuerdo a las fechas festivas y las múltiples celebraciones que se suman durante el mes de Octubre. Los cataloga como inofensivos, pero que tienen un poder oculto de las tinieblas.
Esta temporada en la que se populariza los disfraces y los rituales de hechicería bajo el nombre de Halloween en realidad tienen un trasfondo al que muchos no le prestan la atención adecuada. La exbruja Advirtió del peligro en el que se sumergen no solo los padres sino los hijos que practican tales actos.
Jenny menciona que los padres piensan sobre Halloween como un día cualquiera. Esta festividad no es otra cosa que una puerta abierta para que las tinieblas tomen posesión de los hogares y corazones de la gente. Y aunque las tradiciones americanas inculcaron que los disfraces, la repartición de dulces y las linternas de calabazas, todo tiene su trasfondo, que no es otro sino demoníaco.
“Está todo impregnado de rituales demoníacos. La policía y los servicios de emergencias médicas pueden decir que Halloween es el día en que tienen la mayor cantidad de secuestros y asesinatos de niños. Por alguna razón, en este día, la gente de la policía sabe que algo está pasando”, dijo Jenny.
Jenny, quien desde su adolescencia se involucró de lleno en la brujería y que después de pasar nueve años con una amiga haciendo hechizos, usando drogas y haciendo fiestas para convocar espíritus que poseyeran sus cuerpos, encontró a Jesús y consiguió la libertad espiritual que necesitaba. Hoy por hoy, ella aconseja que instruyan a sus hijos para que no participen en fiestas paganas.
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Fuente: Impacto evangelístico
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