En razón a un trabajo periodístico, por estas semanas hemos estado recorriendo los departamentos del Caribe colombiano.
Nos ha llamado poderosamente la atención que, al dialogar con personajes, historiadores, antropólogos, humanistas, etc., notamos un sentimiento de rechazo e indignidad sobre la manera violenta y despreciable como los españoles llegaron a estas tierras y destruyeron gran parte del legado de los grupos nativos que poblaban la zona antes de la “conquista”, y durante la colonia, y manifiestan la necesidad de rescatar y enseñar a las nuevas generaciones el valioso acervo cultural de nuestros primeros antepasados.
Nuestro recorrido ha coincidido con la fecha del 12 de octubre cuando se “celebra” el denominado “Día de la Raza y la Hispanidad” que revive la controversia sobre si hubo un simple descubrimiento por parte de los españoles o una cruenta invasión que generó el genocidio de centenares de miles de aborígenes (algunos hablan de 100 millones), seguida por la traída forzada de millones (se habla de 40) de negros africanos para esclavizarlos.
Paradójicamente, también con la celebración el “Día de la Región Caribe”, porque el 10 de octubre de 1821 fue expulsado el último de los españoles de Cartagena por obra de las tropas patriotas conducidas por el almirante guajiro José Prudencio Padilla.
Y, por último, coincide con la entrega reciente del premio Nobel de Economía al Dr. James A. Robinson, quien luego de 30 años de estudios, expresa: “Nuestra investigación muestra que la pobreza y la desigualdad en América Latina están profundamente arraigadas en el colonialismo, la explotación de los indígenas y la existencia de la esclavitud. Esas desigualdades se autorreproducen de muchas maneras en la actualidad.”
Curiosamente en Santa Marta, donde se aprestan a “celebrar” los 500 años de su fundación, personajes como Oliverio del Villar y otros historiadores, manifestaron su rechazo total a estos eventos porque: “… los españoles vinieron a saquear, robar, violar a nuestras mujeres y a masacrar a nuestros indígenas”. Incluso sugieren recuperar las enseñanzas de los Mamos de las 4 etnias que hoy ocupan la Sierra Nevada.
En Cartagena nos recordaron los actos de independencia de Mompox y Getsemaní. En Montería y Sincelejo hablaron de las valiosas obras hidráulicas de los Zenú. En Riohacha mencionaron la Rebelión Guajira de 1769.
Curiosamente, hace algunos años emprendimos la “Expedición al Gran Caribe”, para Telecaribe, recorriendo varios de sus países en donde notamos ese mismo sentimiento de resistencia antimperialista.
Por ejemplo, en República Dominicana, a donde primero llegó Colón, que además sufrió 2 veces la invasión de EE. UU.; o en Cuba donde consagraron a José Martí como el gran ideólogo y mártir de su independencia de España y luego de la revolución de Fidel; en Panamá cuya vieja capital fue incendiada en varias oportunidades y, más recientemente, los norteamericanos administraron su canal por casi un siglo; o México envuelta hoy en una polémica, pues su nueva presidenta, Claudia Sheinbaum, no invitó a Felipe VI a su posesión, el pasado 1 de octubre, porque el Rey de España no respondió a la carta que en marzo de 2019 le envió AMLO, el presidente saliente, para instar al monarca español a pedir perdón por la conquista de América.
Volviendo al Caribe colombiano, en Barranquilla ese sentir no es tan evidente. Será porque éramos un pueblo de libres o porque no fuimos fundados por algún ilustre español. Lo cierto es que mientras en otras ciudades de la costa se mantiene un contacto académico o cultural muy cercano con los países de la Cuenca del Caribe, aquí una prestigiosa universidad se sigue celebrando cada año la “Cátedra Europa”.
Por Víctor Herrera Michel Abogado-Periodista. Autor de los libros Como Ganar las Elecciones y Manual del Candidato Ganador. Ganador del premio nacional de periodismo Analdex/Proexport 2012. Ha sido catedrático universitario, presentador de diversos programas en Telecaribe y columnista en varios medios de comunicación impresos y digitales. Actualmente es director del Noticiero de la Gente que se emite por la Voz de la Patria Celestial. @vherreram
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