El teólogo John Piper aclaró que los cristianos que sufren caídas morales o deterioro mental en la vejez no perderán las recompensas acumuladas por años de servicio fiel. Piper respondió a una pregunta basada en 2 Corintios 5:10, que afirma que todos comparecerán ante el tribunal de Cristo para recibir según lo hecho en vida, sea bueno o malo.
Piper rechazó la idea de que se pueda perder el cielo por pecados futuros o debilidad, explicando:
“Las buenas obras de un verdadero cristiano nunca serán canceladas, por nada. Las buenas obras siempre tendrán su recompensa que Dios consideró justa cuando las hicimos.”
El pastor enfatizó que la perseverancia cristiana no significa mantener siempre el mismo fervor, sino continuar en la fe genuina hasta el final. Citando Romanos 8:30, aseguró:
“Nadie se cae. Todos perseveran hasta el final, según la promesa de Dios.”
La seguridad de la salvación y las buenas obras
Para Piper, quienes abandonan la fe permanentemente nunca fueron realmente salvos.
“Esa persona nunca nació de Dios”, afirmó, citando 1 Juan 2:19.
Añadió que las obras externas de tales personas, aunque parezcan religiosas, no son recompensadas porque no provienen de una fe auténtica.
En contraste, cada buena obra genuina de los verdaderos creyentes permanece segura en la memoria y el juicio de Dios. John Piper subrayó:
“Dios ve una buena obra, la ve exactamente como es, y considera apropiado recompensarla.”
El teólogo respaldó su postura con promesas bíblicas como Mateo 10:42 y Efesios 6:8, recordando que toda buena acción será recompensada. Además, citó Hebreos 6:10 para resaltar que Dios es justo y no olvida el amor y el servicio de sus hijos.
La gracia y el gozo eterno
Piper también recalcó que los cristianos no ganan méritos ante Dios por sus obras, ya que todo lo bueno es un regalo de la gracia divina.
“Dios recompensa sus propios dones en nosotros”, explicó, citando 1 Corintios 4:7.
Por último, recordó que en el cielo todos los creyentes serán plenamente felices, aunque algunos reciban mayores recompensas o capacidades para el gozo. Nadie sentirá envidia ni resentimiento, sino gratitud por la justicia y la gracia de Dios.
Este mensaje reafirma que la salvación es por gracia mediante la fe en Cristo, y que las buenas obras son fruto y evidencia de esa fe, no la causa de la salvación. Dios es fiel para recompensar todo acto hecho en su nombre, y su justicia y misericordia prevalecerán en el juicio final.
Tomado de Bibliatodo, editado por Buenas Nuevas
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