Bendecir y ser bendecidos, israelíes llenan la plaza del Muro Occidental

Miles de israelíes y peregrinos judíos de todo el mundo abarrotaron el miércoles la plaza del Muro de las Lamentaciones, en el marco de la festividad de Sucot, participando en una antigua tradición bíblica.

Por primera vez desde los cierres de COVID, masas de judíos recorrieron las calles de la Ciudad Vieja de Jerusalén para llegar al Muro Occidental, mientras se escuchaban oraciones y cantos judíos.

Alrededor de 50.000 personas acudieron para participar en el Birkat HaCohenim o bendición sacerdotal.

“Hoy es un día increíble. Es la fiesta de Succoth, una fiesta que vino a nosotros en el desierto”, dijo Shmuel Blatner, un visitante judío ortodoxo de Francia.

En el Libro de los Números, Dios da a Moisés y a Aarón estas palabras para bendecir a los hijos de Israel:

El Señor te bendiga y te guarde; el Señor haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; el Señor alce sobre vosotros su rostro y os dé la paz.

Aunque la bendición aarónica forma parte de las oraciones diarias de los judíos, esta tradición pública tiene lugar dos veces al año: durante Sucot y Pascua. Para bendecir y ser bendecidos.

Línea sacerdotal

“Es una de las tres fiestas de peregrinación, a la que estamos llamados a subir a pie, a subir al Templo en los días en que existía. Ahora sólo nos queda el Kotel (Muro Occidental) del Templo. Mantenemos la fiesta que era a pie”, dijo Blatner a CBN News.

Los hombres judíos que se cree que forman parte de la línea sacerdotal (llamados cohenim) vienen a bendecir al pueblo de Israel.  El ex embajador de Estados Unidos en Israel, David Friedman, fue uno de los que bendijo al pueblo.

“Los sacerdotes en la época del Templo recibieron el encargo de bendecir al pueblo de Israel. Hoy en día, se reúnen aquí miles de Cohenim para bendecir a todo el pueblo de Israel”, dijo Blatner.

En 2020, muchos cristianos de todo el mundo se familiarizaron con la bendición durante el COVID, cuando artistas internacionales tradujeron y cantaron la versión de Kari Jobe y Cody Carnes de esta canción sobre sus naciones.

Según el pueblo judío, cubre todas las bendiciones, desde la paz hasta la abundancia y la buena salud.

Otra parte de las oraciones procede del Levítico 23, donde dice que hay que traer “el fruto de los árboles hermosos, las ramas de las palmeras, las ramas de los árboles frondosos y los sauces del arroyo” y alegrarse ante el Señor.

Por eso se ven ramas agitadas de las palmas, del sauce y del mirto, así como el fruto del cidro.

Y cuantos más vengan a bendecir y ser bendecidos, mejor.

Fuente CBN

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